¡Primera semana superada en Sri Lanka!
Nuestros estudiantes están aprovechando al máximo cada momento, y no podíamos esperar más para contaros un poco de todo lo que han vivido hasta ahora.
Entre actividad y actividad y muchas nuevas experiencias, estos días han estado llenos de aprendizajes, amistad y mucha emoción. Rocío, la monitora, nos ha enviado un resumen de la semana y unas fotos que capturan perfectamente el espíritu del grupo.
¡Aquí os dejamos un vistazo a su día a día!
Viernes 4 y sábado 5 de julio
Después de un largo viaje llegamos el sábado por la tarde al aeropuerto de Colombo donde la organización local nos recogió y nos llevó al hotel donde estamos alojados. Nos repartimos las habitaciones, cenamos y llegó el momento que más querían algunos con este calor: la súper piscina del hotel. Aquí es donde a muchos les gusta pasar el tiempo libre. El sitio es súper tranquilo, con unas vistas preciosas y el personal del hotel es súper hospitalario y agradable.



Domingo 6 de julio
El domingo tuvimos tiempo para descansar después del largo viaje y comenzamos con la introducción al programa. Aquí los coordinadores del programa introdujeron un poco la cultura local del país, algunas palabras útiles en cingalés para utilizar con los locales cuando estén hablando en inglés y algunos consejos para las actividades de los próximos días. También se les explicó cómo iba a funcionar el programa según las distintas áreas de voluntariado: conservación del medio ambiente y educación.
Por la tarde tuvimos las primeras vistas de la ciudad con un pequeño tour visitando la playa en la que practicarán surf y una de las principales fortalezas de Sri Lanka: Galle Fort
Lunes 7 de julio
El lunes comenzaba el programa de actividades. Por la mañana estuvimos recogiendo plástico del agua de un río. Lo hicimos en kayak, lo cual hizo que esta actividad fuera más divertida. Por la tarde visitamos el templo budista de Kachchiwatta, ¡una auténtica experiencia! Descalzos visitando los distintos budas que tenían, llevando flores, encendiendo “farolillos de aceite” y pidiendo deseos de salud y de éxito. Fue una oportunidad perfecta para conocer un poquito más sobre la cultura local y el budismo.
Después de la cena los chicos tuvieron tiempo libre para pasar en grupo jugando a juegos en las zonas comunes.
Martes 8 de julio
El martes tuvimos un día completo de actividades. Por la mañana hicimos surf en la playa y la verdad es que sorprendieron hasta a los instructores. Lo hicieron genial y están deseando repetir.
Por la tarde comenzamos la primera sesión de voluntariado: rescate de tortugas marinas. Estuvimos en el refugio, observamos los distintos tipos de tortugas de los que se ocupan y hasta vimos a tortugas bebé. ¡Mirad las fotos, son preciosas! Limpiamos estanques donde se encuentran estas tortugas y liberamos algunas de las más pequeñas al mar.
Después de la cena los chicos pudieron disfrutar de una tarde noche de cartas todos juntos.
Miércoles 9 de julio
El miércoles por la mañana nos dividimos en dos grupos para realizar otra actividad de voluntariado: la visita a una residencia de mayores. Allí pudimos acompañar a un grupo de mayores y hacerles una mañana un poquito más amena con pinturas, snacks y hasta un baile final. Aquí pudimos observar las diferencias con las residencias que tenemos en España y entender un poco la historia personal de cada uno de los mayores, algunos forzados a estar ahí porque no tienen más familia.
Por la tarde realizamos un tour por Galle Fort. Gracias a un guía local pudimos conocer un poquito la historia de la ciudad y del país. Después hubo tiempo para las primeras compras del viaje.
Jueves 10 de julio
El jueves por la mañana volvimos al refugio de tortugas. Fue una mañana intensa de trabajo en la que ayudamos en la limpieza del lugar donde se encuentran las tortugas y en darles de comer.
Por la tarde tuvimos una sesión de yoga en una azotea cerca de la playa con unas vistas preciosas. Fue un momento de ejercicio y relajación en el que muchos se iniciaron por primera vez. Tras la sesión volvimos al hotel para cenar con la sorpresa de que ¡había pizza! Algo que echaban mucho de menos los chicos.
Y esto es todo de momento, familias. Está siendo una gran experiencia en todos los sentidos, los locales y el personal del hotel nos están tratando genial. Y todavía nos quedan dos semanitas con mucho por delante, dentro de nada ¡safari!