Y así, llegamos al último capítulo de esta aventura inolvidable llamada «Inmersión en Rochester». Lo que empezó con nervios, maletas cargadas de ilusión y muchas ganas de vivir algo distinto, se ha convertido en una experiencia transformadora, repleta de momentos únicos y aprendizajes que nos acompañarán siempre.
Desde Aston Herencia queremos dar las gracias de corazón a cada uno de vosotros. Por la actitud, la energía, las risas, la entrega, y por haber hecho de este grupo algo realmente especial. Habéis sido generosos, valientes y tremendamente humanos. ¡Sois la razón de que esto haya sido tan mágico!
Y por supuesto, un GRACIAS gigante para Sara, nuestra monitora incansable, que os ha acompañado con alegría, profesionalidad y cariño cada día.
Ahora sí, os dejamos con el resumen de estos últimos días… ¡Agárrense que vienen emociones fuertes!
🌊 Día 22 (17/07/25) – Frente al rugido del Niágara
¡Un día absolutamente inolvidable! Tuvimos la esperadísima excursión a las majestuosas Cataratas del Niágara, uno de los espectáculos naturales más imponentes del planeta.
Nada más llegar, subimos al emblemático barco «Maid of the Mist», que nos llevó muy cerca del estruendo del agua cayendo con toda su fuerza. Con nuestros chubasqueros puestos, nos empapamos de emoción (y de agua), viviendo una experiencia brutal que nos dejó sin palabras.
Después cruzamos a Canadá, pasando los controles de pasaporte, y pasamos allí el resto del día explorando la zona: casas del terror, laberintos, minigolf, bolera… ¡No paramos ni un segundo!
Un día lleno de risas, adrenalina y momentos mágicos que quedarán grabados en nuestra memoria. Por la noche, tocaba volver a nuestras host families y reponernos de tanta emoción.
🎉 Día 23 (18/07/25) – Una fiesta con sabor a hogar
Hoy llegó la esperada Farewell Party, esa celebración que parecía tan lejana… y que, de repente, se convirtió en realidad. Aunque cuesta creer que esto se acabe, nos entregamos al 100% para disfrutar cada minuto.
Cada uno preparó un plato típico de la gastronomía española y ¡menuda maravilla de banquete! Tortilla de patatas, paella, croquetas, pan tumaca, migas… Todo estaba delicioso, y nuestras host families se chuparon los dedos.
Celebramos en casa de una de las familias anfitrionas, donde entre chapuzones en la piscina, partiditos de fútbol y muchas risas, compartimos una tarde preciosa. Emoción, agradecimiento y conexión: así fue nuestra despedida por todo lo alto.
🛍️ Día 24 (19/07/25) – Un sábado en familia
Este sábado fue libre y cada uno vivió la jornada a su manera, en función de las costumbres y planes de sus host families. Algunos salieron de compras, otros aprovecharon para hacer rutas por la naturaleza, pasear con tranquilidad o simplemente disfrutar del hogar.
Hubo charlas, juegos, momentos de relax y risas compartidas. Un día para bajar el ritmo, reconectar y cargar pilas para los últimos días.
⛵ Día 25 (20/07/25) – Domingo de amigos y despedidas anticipadas
Aunque seguíamos en modo familia, algunos decidimos reunirnos para hacer juntos una salida en barco. Fue una actividad preciosa, entre música, paisajes de ensueño y muchas carcajadas.
Otros compañeros pasaron el día con sus host families haciendo planes tranquilos. Pero todos coincidimos en lo mismo: este domingo supo a despedida anticipada, y lo vivimos con el corazón lleno y la mirada puesta en todo lo vivido.
🎢 Día 26 (21/07/25) – Diversión sin límites en Seabreeze
Regresamos a nuestras clases matutinas como de costumbre, pero ya sabíamos que nos esperaba una gran sorpresa: una excursión al parque de atracciones y acuático Seabreeze, uno de los lugares favoritos de los jóvenes en Rochester.
Y no defraudó. Montañas rusas, coches de choque, toboganes de agua y muchísima risa compartida entre amigos y hermanos americanos. Fue una tarde de pura diversión, adrenalina y felicidad. Terminamos agotados, pero con una sonrisa de oreja a oreja.
✉️ Día 27 (22/07/25) – Últimos aprendizajes y corazones llenos
Un día con emociones encontradas. En nuestras últimas clases escribimos cartas de agradecimiento a nuestras host families, recordando todo lo que hemos vivido, aprendido y sentido.
También hicimos entrevistas en inglés para repasar lo aprendido y jugamos a juegos orales como Guesstures o Headbands, que nos arrancaron carcajadas infinitas.
Más tarde, llegó el momento de exprimir al máximo las últimas horas con nuestras familias anfitrionas. Cenas especiales, conversaciones profundas, juegos… y mucho cariño. Una jornada que dejó huella.
📸 Día 28 (23/07/25) – El adiós que no queríamos dar
El día más difícil llegó: las despedidas. Tras tantos días compartidos, abrazar a nuestras host families, decir adiós a nuestros hermanos americanos y dejar atrás una casa que se había vuelto propia fue muy emotivo.
Entre fotos, abrazos y promesas de volver a vernos, partimos rumbo a New York City, donde pasaríamos nuestra última noche juntos. Aunque llegamos tarde por el tráfico, lo cerramos como sabíamos hacerlo: con pizza, risas, recuerdos y una última noche en grupo.
✈️ Día 29 (24/07/25) – Vuelo entre recuerdos
Desayunamos todos juntos en el hotel antes de poner rumbo al aeropuerto. Las maletas pesaban más que nunca… ¡y no solo por las compras! También llevaban dentro todo lo que habíamos vivido.
Tras facturar y pasar controles sin incidentes, tuvimos un rato para las últimas compras y para empezar a despedirnos de esta gran experiencia. El vuelo fue tranquilo, pero cada hora que pasaba nos acercaba a casa… y al final de algo que no queríamos que terminase.
🤗 Día 30 (25/07/25) – El regreso… y el comienzo de algo nuevo
A las 6:00 de la mañana aterrizamos en Madrid. El reencuentro con nuestras familias fue de esos que no se olvidan. Abrazos, ojos brillantes, sonrisas de alivio y emoción.
Pero antes de irnos con ellos, nos dimos una última gran despedida entre nosotros. Más abrazos, risas con ojeras, alguna que otra lágrima… y cómo no, las fotos finales. Volvimos siendo otra cosa: no solo compañeros, sino una familia que ha vivido algo increíble juntos.
❤️ Gracias, equipo
No puedo cerrar este blog sin volver a dar las gracias.
Gracias, chicos, por todo lo que habéis aportado. De cada uno me llevo algo.
Gracias, host families, por habernos acogido con tanto amor y hacer que nos sintiéramos en casa.
Gracias, familias en España, por confiar, por la educación tan bonita que les habéis dado, y por haber permitido que vivieran algo tan especial.
Enhorabuena por haber hecho de este verano algo irrepetible.
Espero veros pronto.
¡Os quiero, equipo!
Sara