El hecho de decidirse a cursar un año académico en el extranjero lleva aparejado un proceso muy importante de recopilación de información; y es que los países entre los que podemos escoger son numerosos y cada uno de ellos se caracteriza por un sistema educativo diferente. En el post de hoy nos proponemos abordar las características del sistema educativo británico con respecto al español.
Educación práctica
Si por algo se caracteriza el sistema educativo español con respecto a otros sistemas como el británico (o el estadounidense o canadiense) es sin duda por su corte teórico. Un alumno que tenga la oportunidad de continuar sus estudios en Reino Unido descubrirá una nueva forma de aprender, mucho más práctica y centrada en fomentar sus habilidades y su capacidad para tomar decisiones. La retención de información queda en un segundo plano, lo que se potencia es que el alumno sea capaz de analizar y asimilarla. Este tipo de enfoques educativos están especialmente preocupados porque el alumno sea capaz de abordar los problemas por sí mismo.
Aulas específicas por asignaturas
Precisamente por tratarse de una educación muy práctica, los alumnos cuentan con aulas destinadas específicamente a cada asignatura, teniendo que moverse de aula para cada materia. Aunque esto cada vez es más habitual en España, son muchas las asignaturas que se continúan impartiendo en el mismo espacio.
Sin libros
Las mochilas cargadas de libros son una imagen muy habitual en España pero cada vez menos frecuente en el resto de países donde se han sustituido por otro tipo de recursos (fotocopias, ordenadores, tablets…) Para ver a los alumnos consultando libros tenemos que irnos a los espacios habilitados para ello como son las bibliotecas.
Evaluación continua
Si bien se dice del sistema educativo español que es un sistema de evaluación continua, en nuestro país los exámenes finales juegan un papel muy relevante en las notas de los estudiantes. El sistema británico da mucha importancia al hecho de que el alumno se esfuerce diariamente. Para ello los profesores tratan de motivarlo y moverlo hacia la mejora continua.
Trabajo por objetivos
En estrecha relación con los dos puntos anteriores, está el hecho de que el sistema educativo británico establezca una serie de objetivos a alcanzar al final del curso. Estos objetivos se establecen de forma individualizada, dependiendo del perfil del alumno, y promueven su capacidad de superación.
Trabajo en equipo
El hecho de trabajar en equipo es algo cada vez más habitual en los sistemas educativos, y es que aprender a trabajar con los demás es algo que coloca al alumno en una posición muy ventajosa de cara a su futuro laboral, sabiendo compartir trabajo y méritos con el resto de sus compañeros.
Educación en internados
Si hay un país donde la educación en internados sea lo normal, ese es Reino Unido. Estos son una auténtica institución educativa en la cultura anglosajona y generalmente están situados en pequeñas poblaciones o en zonas de gran interés cultural o histórico. Existen internados privados y públicos, estos últimos con precios más asequibles porque están subvencionados por el gobierno británico.
Sistema divido en etapas
El sistema educativo británico se divide en tres etapas: 1) PREP SCHOOLS (educación Primaria desde Year 2 a Year 6). 2) SENIOR SCHOOLS (educación Secundaria, se inicia en Year 7 -6º de primaria- y dura 5 años, hasta Year 11 -4º de ESO-. 3) A LEVELS (Year 12 y Year 13 -1º y 2º de Bachillerato-. Los cursos de Secundaria y Bachillerato se agrupan en ciclos de más de un curso por lo que algunos colegios no permiten el acceso a uno solo de los cursos del ciclo o bien exigen unos requisitos académicos especiales.
Examen CGSE
Los alumnos deben superar este examen para poder pasar a los cursos que equivalen a nuestro Bachillerato.
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