Halloween ya está a la vuelta de la esquina, buena muestra de ello es que nuestros estudiantes en Estados Unidos y Canadá ya nos han empezado a enviar las primeras fotografías relacionadas con esta popular fiesta.
Es el caso de Elena, nuestra alumna de Año Académico en Canadá, ella ya sabe muy bien qué es eso de visitar el pumpkin patch para buscar la mejor calabaza, una que esté a la altura del popular festejo y con la que poder dar rienda suelta a su imaginación para que esta especie redondita cobre vida con ojos y boca.
En definitiva, un pumpkin patch es una granja, un auténtico laberinto de cultivos de mazorca, llenos de paja y, por supuesto, provistos con un sinfín de calabazas de todos los tamaños, colores y formas. Un lugar perfecto para empezar a disfrutar de los preparativos de Halloween y de paso pasar una tarde de octubre muy divertida.
Hacerse con una pumpkin (calabaza) en EE.UU. cuesta aproximadamente unos 5 USD. Lo que no sabe mucha gente es que esta especie es originaria del Noreste del país, donde ya la cultivaban los indios para incluirla como ingrediente estrella en su comida.
Si bien en España tenemos poca experiencia en esto de Halloween (aunque cada año que pasa lo celebremos más), en Norteamérica, como auténticos expertos que son en la materia, saben muy bien qué es eso de prepararlo con meses de antelación. A estas alturas todo se viste de naranja y de negro, las calabazas y los esqueletos llenan los colegios, mientras en las casas se preparan las recetas para hacer galletas y, por supuesto, los caramelos con los que los más pequeños jugarán a eso del «truco o trato» (trick or treat) que tanto hemos visto en las películas.
¡Feliz Halloween a todos!