¡Hola familias!
María nos manda el último update desde Carolina del Norte, ¡qué pena les da tener que volver! Han creado fuertes lazos entre ellos, con sus compañeros, con sus familias… ¡seguro que están deseando volver!
Han aprovechado esta semana para hacer cosas muy chulas, como asistir a las clases más divertidas del High School, actividades de aventura, deporte…
Nuestra semana ha empezado con una visita al centro: U.S. White water centre. Las actividades de las que hemos disfrutado allí son: tirolinas, salto caída libre, rafting y escalada. ¡Cómo hemos disfrutado! Las tirolinas nos han impresionado muchísimo al principio, después solo queríamos repetir y repetir. El salto libre ha sido una pasada, ¡todavía tenemos el susto en el cuerpo! Hacía mucho calor, por lo que el mejor plan para la tarde ha sido hacer rafting. ¡Qué pasada!
Como aún teníamos ganas de más, hemos acabado la jornada con un poco de escalada. En el peor de los casos, acabábamos en el agua refrescándonos y volvíamos a intentar escalar esas paredes que parecían imposibles. No obstante, estamos orgullosos de nuestros resultados.
Después de un día tan divertido y emocionante en el parque, nos vamos a compartir tiempo en las clases con nuestros hermanos y alumnos de otras clases que aún no teníamos el placer de conocer. Es impresionante sentir que la comunicación y la convivencia es posible entre culturas y lenguas tan diferentes. Compartir siempre es crecer. Volveremos a casa sintiendo que nos llevamos lo mejor de ambos mundos. ¿No es maravilloso?
Cómo ya os habíamos contado, el sentimiento de comunidad es muy grande. Nosotros queremos ser parte de esta comunidad que tanto nos está ofreciendo y por ello hemos hecho una actividad de trabajo comunitario. Los alumnos de Pine Lake lo tienen como asignatura en su currículum, son 40 horas al año. Ésta es otra de las diferencias con respecto a nuestro sistema educativo.
Hoy hemos tenido la suerte de ir a una barbacoa, ¡Qué rico! Uno de los papás, campeón del concurso de preparar barbacoas, ha cocinado durante nueve horas la carne de cerdo a la barbacoa, plato típico de Carolina del Norte que hemos disfrutado hoy. También había un montón de postres: pan de calabaza, pudding de plátano y todo tipo de cakes y cookies típicos. Las cookies las he llevado yo en nombre del grupo como agradecimiento y son consideradas las diez mejores de América.
En el tiempo libre, pasamos tiempo con nuestros hermanos, hermanas y padres americanos. Vamos a ver el musical de Aladdin, vamos a ver un partido de fútbol, pero esta vez ha sido fútbol fútbol, el que todos conocemos en España. Cenamos en un restaurante de lujo, vamos de compras, nos vamos a la montaña o a la playa. Sobre todo seguimos sintiendo que somos uno más.
Los profes están encantados con nuestra presencia en el cole estos días y se han prestado voluntarios a que asistamos a las clases consideradas más molonas. Entre otras, hemos trabajado por estaciones en la clase de historia; hemos jugado a jockey en el gimnasio; hemos pilotado un avión en la clase de ingeniería; hemos ido a clase de teatro y de baile y por último hemos ido a clase de arte y hemos creado nuestra propia pieza de arte.
Nuestra experiencia americana no podía terminarse sin ir a un centro comercial: “the mall” y sin ir a un cine. Bueno, ya podemos tachar de nuestras lista ambas cosas, porque ya lo hemos hecho.
Aún nos quedan unas horas más aquí, por eso nos han preparado una fiesta de despedida en un club en el lago donde hemos disfrutado de unas vistas formidables y de un ambiente inmejorable con todas nuestras familias y amigos.
Muy pronto nos vais a tener en España de vuelta. No seremos los mismos que nos fuimos, eso es seguro, hemos crecido…
Tenemos tantas cosas que compartir ahora… ¡Ha sido una experiencia que nunca olvidaremos!