¡Hola familias!
Nos llegan las primeras noticias desde Chicago. Antonio, su monitor, nos ha puesto al día y no parece que se lo estén pasando nada mal. ¡No van a querer volver a casa! Así es como han vivido la semana 1 del programa:
Después de un largo viaje el pasado día 4, por fin comenzamos nuestras aventuras al otro lado del Atlántico, al borde del lago Michigan.
Para muchos ha sido increíble porque era la primera vez que entraban en EE.UU. Además, todos han aprendido a lidiar con Inmigration y Customs antes de conocer a las familias que nos llevarían a nuestra casa estas tres semanas. El problema es que algunos han tenido que dejar el jamón que traían para sus familias de acogida porque los agentes de aduanas ¡no pasan ni una! Finalmente aquí están, completamente adaptados al ritmo del Midwest americano, sobre todo gracias a la cálida bienvenida de nuestros anfitriones, que son estupendos, tanto que desde el mismo día de nuestra llegada han hecho lo posible para que nos sintamos como en casa.
Al día siguiente nos pusimos camino a la gran ciudad. Chicago está llena de cosas interesantísimas. Por ejemplo, ese día visitamos el museo del dinero de la Reserva Federal y pudimos tocar un maletín con un millón de dólares dentro. Después fuimos a la Willis Tower para ver la ciudad de los rascacielos desde arriba y, ¿sabéis qué sentimos cuando nos asomamos a los miradores con suelo de cristal? Pues que queríamos repetir y volver a experimentar la sensación de vacío de más de 400m metros bajo nuestros nuestros pies, así que hicimos cola hasta tres veces para sacarnos las fotos más increíbles.
Esta semana también hemos conocido el instituto y los horarios de nuestros Shadow Buddies, los estudiantes a los que acompañamos en clase y que nos muestran cómo es su rutina en uno de los tres institutos a los que vamos. Las clases son más dinámicas que en España y, por ejemplo, algunos han hecho alfarería o incluso han aprendido a cambiar una rueda de un coche.
El viernes fue el día del partido de fútbol americano del instituto y sí, es como en las películas: la banda, el himno, las cheerleaders y todo lo demás, así que nos lo pasamos genial. Durante el fin de semana hemos hecho diferentes actividades con las familias, por ejemplo nos han llevado a otros estado, como Winsconsin o Indiana, así que ya solo nos quedan dos menos en la lista. El sábado también hubo tiempo para explorar las famosas tiendas de segunda mano o para comprar un helado en el típico camión de los helados que recorre los barrios con su melodía.
Todavía quedan muchas cosas por descubrir y visitar y muchas típicas fotos que sacarse durante los próximos días: un partido de béisbol, the bean, excursiones… ¡Ya veréis!