Nuestros chicos del programa de Voluntariado Sri Lanka ya llevan algo más de dos semanas viviendo esta experiencia. ¡Estamos entusiasmados por compartir todo lo que han vivido estos días! Lucía, su monitora, nos cuenta las actividades que han realizado y nos envía fotos de todos. ¡No te lo pierdas!
Hola familias!
Después de una primera semana llena de emociones y nuevas experiencias, llegamos al final de nuestra segunda semana de voluntariado en Sri Lanka. Ha sido una semana igualmente intensa y enriquecedora, en la que hemos continuado con nuestras actividades diarias y hemos añadido algunas nuevas aventuras que nos han dejado recuerdos inolvidables. ¡Os lo contamos todo!
Continuamos con la guardería
Esta semana, hemos seguido dedicando gran parte de nuestro tiempo al voluntariado en la guardería local. Los niños ya han comenzado a confiar en nosotros, lo que ha hecho que las actividades sean aún más divertidas y gratificantes. Hemos estado aprendiendo sobre las formas y los astros del cielo tanto en inglés como en cingalés, lo que ha sido una experiencia educativa tanto para ellos como para nosotros. Además, hemos cantado, jugado en el patio y, como sorpresa especial, organizamos una sesión de cine. Ver la emoción en sus rostros mientras veían la película bebiendo batido de chocolate fue un momento inolvidable para todos.
Primeros pasos en el surf
El inicio de la semana también nos trajo una nueva aventura: una sesión de surf. Nos dirigimos a la playa por la tarde cuando el estado del mar era propicio para una iniciación, listos para enfrentarnos a las olas. Los instructores fueron increíblemente amables y divertidos, lo que hizo que la experiencia fuera mucho más entretenida y satisfactoria. A pesar de que algunos de nosotros teníamos más habilidad que otros, todos logramos ponernos de pie en la tabla al menos un par de veces. Fue un momento de diversión y risas pasadas por agua (más de uno le dio un buen trago al mar), y definitivamente algo que muchos de nosotros queremos repetir… ¡Quizá el próximo domingo libre nos animamos!
Visita a la reserva de elefantes de Udawalawe
El fin de semana fue especialmente memorable gracias a nuestra visita a la Reserva de Elefantes de Udawalawe. Aunque tuvimos que madrugar mucho (nos levantamos a las 3 de la mañana ni más ni menos), el esfuerzo valió la pena. Ver el amanecer en la reserva fue como estar en la escena inicial mítica de «El rey león». Durante nuestro recorrido, tuvimos la oportunidad de observar a numerosos elefantes en su hábitat natural, además de chacales, cocodrilos y, ¡hasta algunos elefantes bebés! Fue una experiencia que nos dejó maravillados y nos recordó la importancia de la conservación de estos magníficos animales. ¿Habéis montado alguna vez en Jeep? ¡Es como una mini montaña rusa!
Día libre de playa, batidos, compras y pasacalles
El domingo fue un día de descanso bien merecido. Decidimos pasar la mañana en la playa, donde nos relajamos tomando el sol, escuchando música y bañándonos en el mar. Fue una forma perfecta de recargar energías después de una semana intensa. Por la tarde, algunos de nosotros optamos por una siesta reparadora, mientras que otros aprovecharon para hacer compras de regalitos para nuestros seres queridos. La playa y el mercado local nos ofrecieron un día perfecto de relajación y exploración. También visitamos por nuestra cuenta el templo budista de Unawatuna, que resultó ser una experiencia súper top, ya que estamos viviendo un festival que solo se realiza una semana al año… ¡Y es justo ahora! Vimos el templo, tomamos un batido en un chiringuito en la playa… Y también hemos tenido la oportunidad de ver un desfile/procesión budista lleno de trajes y bailes típicos, elefantes y cosas, cuanto menos, curiosas. ¡Cuando volvamos os enseñamos todos los vídeos!
Segunda sesión de yoga
Nuestra segunda sesión de yoga fue notablemente mejor que la primera. Poco a poco, estamos adquiriendo más flexibilidad y mejorando nuestras posturas. El ambiente tranquilo y el enfoque en la meditación nos han ayudado a conectar más con nosotros mismos y a encontrar un equilibrio entre el trabajo duro y la relajación.
Voluntariado en la reserva de tortugas
Volvimos a la reserva de tortugas para nuestra segunda sesión de voluntariado. Esta vez, nos encargamos de lavar y ducharlas, una tarea que resultó ser más desafiante de lo que parecía debido a la fuerza y el carácter de estos animalitos. Además, ayudamos a limpiar y preparar el nido/incubadora para la próxima tanda de huevos que llegará a la reserva. La playa donde se encuentra la reserva es un lugar paradisíaco, comparable a los escenarios de «Piratas del Caribe». Trabajar en un entorno tan hermoso hizo que la experiencia fuera aún más gratificante… ¡Y aún nos queda otra sesión!
Reforestación del manglar
Uno de los proyectos más significativos de la semana ha sido la reforestación de manglares. Nos dirigimos a una isla preciosa donde plantamos 100 árboles a lo largo de sus orillas. Aunque fue un trabajo físicamente exigente, la satisfacción de contribuir a la conservación del ecosistema local fue inmensa. Para culminar la jornada, disfrutamos de cocos frescos, abiertos a machete directamente de la palmera. ¡No hay nada más natural y refrescante!
Seguimos con nuestra aventura…
Cada día en Sri Lanka nos ofrece nuevas oportunidades para aprender, crecer y contribuir a la comunidad local. Esta segunda semana ha sido una mezcla perfecta de trabajo voluntario, aventuras y momentos de relajación. Estamos deseando compartir con vosotros nuestras experiencias de la tercera semana, donde continuaremos explorando, ayudando y creando recuerdos que durarán toda la vida. ¡Hasta la próxima semana!
Lucía